Francisco Brines


BRINES VISTO POR VILLENA

 


POR PEDRO GARCÍA CUETO

Escritor y crítico literario español


 

   La editorial Renacimiento ha lanzado un libro donde Luis Antonio de Villena va destapando el universo de Brines, pero de alguna manera no convirtiendo el acto de mirar en un reflejo poético, sino en un espejo donde vemos al hombre Brines y su pasado.

  Ya lo dice David Pujante, para el poeta valenciano la intimidad quedaba en un túnel, nunca se descubría como tal. El amigo de tantos años, Luis Antonio de Villena, prometió no contar nada de la vida sexual del poeta valenciano en vida de aquel, pero, ya muerto, ha convertido este libro en un detallado espacio de encuentros con muchachos, en muchas intimidades que, quizá, no deberían haber salido a la luz.

   Y nadie es quién para decirlo, porque la libertad del poeta para contar quién era su amigo no ha de tener censura, pero sí que hay un compromiso con la intimidad, que es un espacio donde solo los curiosos, los ávidos de hundir a los demás, los que pretenden hacer leña del árbol caído pueden disfrutar. Los que admiramos a Brines como maestro no nos interesa su vida sexual, que pertenece a un ámbito íntimo y secreto. En todo caso, solo si el propio poeta la hubiera desvelado, por iniciativa propia, podríamos entenderlo.

   ¿Cuál es entonces el sentido de este libro? Para Villena es imposible desentrañar la poesía de Brines sin conocer sus escarceos amorosos, sus relaciones con chicos, su lujuria. Y ahí discrepo, no hace falta contar con pelos y señales con quién has estado para admirar al hombre que escribía versos, que, sin lugar a dudas, ha sido uno de los más grandes poetas de nuestra poesía.

   Además, deja en entredicho la labor de la Fundación Brines, como si esta manejara los hilos de un Paco ya en decrepitud (no ahorra Villena adjetivos para el maestro: lujurioso, tacaño, decrépito en los últimos años).

   Estamos ante un libro prescindible, porque no necesitamos saber, salvo para los amantes del cotilleo barato, con quién se acostaba el poeta, no necesitamos ahondar en si perdió su potencia sexual, todo es un alarde de exhibicionismo donde no vive la poesía, ni se respiran los versos del poeta.

  Yo que escribí sobre su obra, que fue desentrañando su mundo poético, jamás entré en disquisiciones de tal calibre, mucho por desconocimiento, claro, no he vivido los setenta ni las experiencias de Villena con Brines, pero también, aún conocedor de algunas anécdotas que otros me contaron, deseché en el libro nada que no fuera la grandeza de la poesía.

   Renacimiento lo publica y solo queda leerlo como si nos hablara de un obseso de la lujuria, de su encuentro con muchachos, nada del Brines que yo conocí. Luis Antonio de Villena dibuja un personaje, pero no un poeta, un ser lujurioso, pero, aunque muchos hechos hubiesen ocurrido, para qué contarlo.

   Cuando terminé el libro, supe que los admiradores del poeta lo seguirán siendo, porque olvidarán lo leído casi en el momento y se quedarán con la grandeza del poeta, con su serenidad, con su alto sentido de lo ético. Los versos vivirán para siempre y este libro quedará pronto en lo anecdótico. Los que queremos al poeta, estamos muy lejos de entrar en lo íntimo, porque nos basta lo que los versos sugieren, lo que las palabras contienen en su llama. Todo lo demás, papel mojado.

 

TÍTULO: BRINES, LA VIDA SECRETA DE LOS VERSOS (HISTORIA DE UNA AMISTAD)

AUTOR: LUIS ANTONIO DE VILLENA

EDITORIAL: RENACIMIENTO

AÑO: 2023