Cinzia Marulli


È nata a Roma il 6 marzo 1965 dove tuttora risiede. Ha sempre coltivalo la passione per la poesia e la letteratura ampliandone la ricerca anche attraverso forme di sperimentazione che l’hanno portata a creare connubi con altre arti come la musica, la pittura e la video-arte. Organizza e coordina eventi e scambi culturali con lo scopo di diffondere la poesia. Per la casa editrice Progetto Cultura cura la collezione quaderni di poesia Le gemme. Ha pubblicato nel 2011 la raccolta poetica Agave (LietoColle) con l’introduzione di Maria Grazia Calandrone e nota critica di Plinio Perilli. Sono di prossima pubblicazione le raccolte poetiche Autobiografia del silenzio e Percorsi. Attualmente sta traducendo in italiano alcuni tra i più rappresentativi poeti contemporanei cinesi.


Cinzia Marulli nació en Roma el 6 de marzo de 1965, donde todavía reside. Siempre ha cultivado su pasión por la poesía y la literatura, extendiendo su búsqueda también a formas de experimentalismo que han llevado a la creación de una fusión entre diversas formas artísticas, como música, pintura, video-arte. Organiza y coordina eventos y encuentros culturales con la finalidad de difundir la poesía. Para la editorial Progetto Cultura cuida la colección de cuadernos de poesía Le Gemme. Ha publicado en 2011 su libro de poesías Agave (LietoColle), con la introducción de Maria Grazia Calandrone y nota crítica de Plinio Perilli. Próximamente va a publicar sus nuevos libros de poesía, Autobiografía del silencio y Percorsi. En la actualidad está traduciendo al italiano algunos de los más representativos poetas chinos contemporáneos.


Edición bilingüe. Traducción de Gianni Darconza

 

 

La ricerca

 

Lo cerco quel luogo dove ritrovarmi:

l’aspirazione cavalca i graffi silenti della mia pelle lacera

e la notte svela la sua oscurità. In quel buio nasce l’anelito

è un buio profondo che confonde di nero i contorni delle idee

e le idee si trasformano e aleggiano nell’aria inesplorata.

Lo cerco dunque, lo cerco infinitamente quel luogo smarrito

giacchè un giorno lo conobbi, quando feto nuotavo nell’amnios incantato.

Ma ora non ci sono ascolti, neanche un piccolo suono che possa rompere quel nero

c’è un muro di ovattata assenza nei cerchi degli alberi, non tempo, non luogo

- solo legno.

Forse il mistero è nella fine. E’ lì che si trova quel luogo, 

quel luogo che abbraccia chioma e radice e le trasforma seme.

Ancora sussurra il desiderio, non vuole credere che al termine si concluda tutto.

Deve pur esserci un dove anche se fuori da questo tempo;

nella dimensione altra del sogno forse. Lì ci sono stata.

L’ho percorso tutto il sentiero - ed è bello, c’è il sole  che scalda lo sguardo

e lo sguardo si culla nella chiarezza del bene.

Ci vorrebbe un limbo di luce dove racchiudere le emozioni

per tornare ad assaporarle come le merende golose dei bambini.

Un pensatoio in cui riporre le ansie, un cassetto senza serratura

che accolga i dolori.

Lo cerco, dunque, quel luogo dove ritrovarmi. Lo cerco però

-  nella mia povera piccola anima.

 

 

La búsqueda

 

Lo estoy buscando, aquel lugar donde volver a encontrarme:

la aspiración cabalga los rasguños silenciosos de mi piel gastada

y la noche revela su oscuridad. En aquellas tinieblas nace el anhelo

es una oscuridad profunda que confunde de negro los perfiles de las ideas

y las ideas se transforman y flotan en el aire inexplorado.

Lo estoy buscando, pues, buscando infinitamente aquel lugar perdido

porque un día lo conocí, cuando feto nadaba en el amnios encantado.

Pero ahora no hay nada que escuchar, ni un sueno pequeño que pueda romper esa oscuridad

hay una pared de algodonada ausencia en los círculos de los árboles, no tiempo ni lugar

‑ sólo madera.

Quizás el misterio esté en el fin. Es allí donde se encuentra ese lugar,

ese lugar que abraza melena y raíz y las convierte en semilla.

Todavía susurra el deseo, no quiere creer que al final todo se concluye.

Tiene que existir un donde, aun si fuera de este tiempo;

en la dimensión otra del sueño, quizás. Yo ya estuve allí.

Recorrí todo el camino – y es bonito, hay sol que calienta la mirada

y la mirada se acuna en la claridad del bien.

Se necesitaría un limbo de luz donde encerrar las emociones

para volver a saborearlas como meriendas ricas de niños.

Un retiro donde reponer las ansias, un cajón sin cerradura

para acoger los dolores.

Lo estoy buscando, pues, aquel lugar donde volver a encontrarme. Lo estoy buscando pero

‑ en mi pobre alma pequeña.

 

 

Il mio buio

 

Il buio avanza

avvolgendo il debole sussurro della fatica

giacché non ci sono più forze per gridare

il dolore dei muscoli spezzati

In quel nero senza luce

giace il corpo inerme della coscienza

cerca un sonno che non esiste

un vento quieto di libeccio che porti via le ossa

rimaste a memoria di una certa vita.

E’ folle il pensiero della luce

avanza come l’esercito di terracotta – nel tempo –

lasciando le distanze nelle retrovie.

Non ci sono alberi sotto cui ripararsi

neanche una foglia nel cieco giardino del dubbio.

Non ci sono i rami a cui appendere i propri

rimorsi per lasciarli asciugare nella speranza.

Voi, vaghe ombre. Se ci siete non vi posso vedere

nascondetemi con il vostro fiato, nascondetemi perfavore.

Sussurratemi il vostro nome affinchè possa riconoscervi

assolatemi, dunque con il vostro buio.

 

 

Mi oscuridad

 

La oscuridad avanza

envolviendo el débil murmullo del cansancio

puesto que no hay más fuerzas para gritar

el dolor de los músculos rotos.

En esa negrura sin luz

yace el cuerpo inerme de la conciencia

busca un sueño que no existe

un viento tranquilo de lebeche que se lleve los huesos

recordados a memoria de una cierta vida.

Es loco el pensamiento de la luz

avanza como el ejército de terracota – en el tiempo ‑

dejando las distancias en la retaguardia.

No hay árboles bajo los cuales refugiarse

ni una hoja en el ciego jardín de la duda.

No hay ramas a las que colgar su propios

remordimientos para dejarlos a secar en la esperanza.

Vosotras, vagas sombras. Si estáis no os puedo ver

escondedme con vuestro aliento, escondedme por favor.

Susurradme vuestro nombre para que os pueda reconocer

exponedme, pues, al sol de vuestra oscuridad

 

 

Ricordi

 

Te lo ricordi mamma

il caffè alle quattro di mattina

quando il buio ancora penetrava

nelle ossa?

Qualche straccio addosso

il vecchio cappotto nero e uno scialle

intorno alla testa

e poi tu e papà

lungo via del tritone a camminare

silenziosi, fianco a fianco

con la testa bassa e il sonno negli occhi

l’ufficio sempre lo stesso

le stesse cose da pulire

con le ginocchia sul parquet lucido

e le mani sante nelle latrine

io, invece, ancora a casa

con i libri sulle ginocchia

e poi a scuola per distruggere lo straccio sporco di miseria.

 


Recuerdos

 

¿Te acuerdas, mamá

el café a las cuatro de la mañana

cuando la oscuridad penetraba todavía

en los huesos?

Algunos andrajos encima

el viejo abrigo negro y un chal

alrededor de la cabeza

y luego papá y tú

por la calle del tritón andando

en silencio, lado a lado

baja la cabeza y el sueño en los ojos

la oficina de siempre

las mismas cosas que limpiar

con las rodillas sobre el entarimado lustroso

y las manos santas en los retretes

yo, en cambio, todavía en casa

con los libros sobre mis rodillas

y luego al colegio para destruir los andrajos sucios de miseria.

 

 

 

Autobiografia del silenzio

 

L’ho dimenticate quelle mani sporche

che scavavano tra le me gambette

(mi hanno resa sorda all’amore)

m’hanno portato nel silenzio interno

delle costole

e non c’era sapone, niente acqua

per lavare via

l’ombra sporca sulla pelle, la pelle impaurita

di carezza

che ha il volto mostruoso di satana.

 

Il mio biancore immenso mi rende luce

tra quel nero

e mi avvolge nel mio stesso bene,

Questo bene ho per combattere

quella pura essenza di bambina,

quegli occhi aperti e il pudore

tanto, tanto il pudore di sentirmi profanare.

 

Niente reggerà il peso del mondo

atomi più grandi delle molecole

 

ognuno poi trova il suo riparo,

quel luogo sicuro dove

non sentire.

 

 

Autobiografía del silencio

 

He olvidado aquellas manos sucias

que cavaban entre mis piernecitas

(me han hecho sorda al amor)

me han llevado al silencio interior

de mis costados

y no había jabón, ni agua

para lavar

la sombra sucia sobre mi piel, la piel asustada

de caricias

que tiene el rostro monstruoso de Satanás.

 

Mi blancor inmenso me da luz

entre aquella negrura

y me envuelve en mi mismo bien.

Este bien es lo que tengo para luchar

contra aquella pura esencia de niña

aquellos ojos abiertos y el pudor

el mucho, mucho pudor de sentirme profanar.

 

Nada sostendrá el peso del mundo

átomos más grandes que moléculas

 

cada uno además encuentra su protección

ese lugar seguro donde

no sentir.

 

 

Scrivo?

 

Scrivo perchè sento la luce farsi specchio

perchè cerco il percorso

che mi porti ad una meta senza arrivo,

ad un bosco che odori di bosco,

perchè mi sento ghianda

dispersa nella terra

scrivo perchè fiorisco come un hibiscus al sole

perchè la mia voce non è abbastanza

forte da urlare la tempesta che mi scuote.

 

Scrivo perchè un giorno un amico

mi regalò una penna facendomi credere

che fosse una bacchetta magica.

 

 

¿Escribo?

 

Escribo porque siento la luz hacerse espejo

porque busco el camino

que me lleve a un destino sin llegada

a un bosque que huela a bosque,

porque me siento una bellota

diseminada en la tierra

escribo porque florezco como un hibisco al sol

porque mi voz no es suficientemente

fuerte para gritar en la tempestad que me sacude.

 

Escribo porque un día un amigo

me regaló una pluma haciéndome creer

que era una varita mágica.